El caso de la banda “Sr. Blues” y el Festival Internacional Jazzatlán Oaxaca
El caso de la banda “Sr. Blues” y el Festival Internacional Jazzatlán Oaxaca
Texto por Pamela Vazquez Moreno
Foto por Pauline Rosen-Cros (14 de julio 2018, Biblioteca Henestrosa, Oaxaca)
Oaxaca y Ciudad de México.- En recientes días, las redes sociales han hablado sobre el caso de la banda “Sr. Blues” y su queja sobre el Festival Internacional de Jazzatlán Oaxaca (FIJO), celebrado del día 10 al 13 de abril en la Ciudad de Oaxaca, por el mal trato expresado por Marco Albert, líder de la banda, por parte de los productores del FIJO, Rodrigo Moctezuma; la denuncia hecha en redes sociales y el medio local El garage Istmeño, así como y el uso, sin su consentimiento, del nombre de dicha banda en productos publicitarios.
Esto sucede en un contexto en donde músicos y asistentes de eventos privados y públicos, tanto masivos como locales, alzan la voz para evidenciar la violencia estructural por parte de festivales, venues, productores y gestores, afectando sus derechos laborales y condiciones que ponen en peligro la seguridad personal, física, económica y mental del talento, técnicos, medios y asistentes.
Esta situación hace inevitable la necesidad de evidenciar y cuestionar malas prácticas de eventos como estos, razón por la cual fue de interés de Letras en Jazz indagar más sobre la queja en redes sociales de Marco Albert, líder de la banda “Sr. Blues”.
¿Quiénes son los actores?
Festival Internacional Jazzatlán Oaxaca: Proyecto realizado del 10 al 13 de abril del 2025 en la ciudad de Oaxaca bajo la iniciativa, independiente y autogestiva, de Rodrigo Moctezuma y Rodrigo Rosas, como productores del mismo. Cabe mencionar que la marca “Jazzatlán” se usa de forma independiente y bajo un permiso de uso de marca, ajeno al funcionamiento de los club de jazz “Jazzatlán Capital” y “Jazzatlán Cholula”.
Marco Albert: “Hay que quejarse y levantar la voz cuando las cosas no nos parecen justas” nos dice en entrevista. Músico de blues e impro libre, italiano que se ha radicado en México por 12 años, 10 de los cuales los vivió en Oaxaca, Oaxaca. Ha sido productor y gestor de festivales locales e internacionales, tanto en México como Italia. Actualmente es profesor de Inglés y músico activo en la escena de blues e impro libre.
Sr. Blues (2016-presente): ha sido una banda de blues e improvisación libre a la que han participado varios músicos de Oaxaca y de la CDMX y que lidera Marco Albert, quien prefiere no nombrar a los músicos que han tocado para evitar represalias en su contra de cualquier tipo.
Malinalli Montes: Coordinadora del foro/restaurante “Humito”. “Me hago responsable de la falta de comunicación con los músicos de Sr. Blues a la inclusión de la cartelera del FIJO, así como deslindar de toda esta situación al restaurante. Estoy en disposición de no cometer los mismos errores y aprender de esta experiencia”.
Rodrigo Moctezuma: Socio de la empresa restaurantera “Jazzatlán” y productor independiente del FIJO.
Rodrigo Rosas: Gerente de Jazzatlán Capital y productor independiente del FIJO Jazzatlán Capital: Sucursal de la empresa “Jazzatlán” en la capital de CDMX.
Jazzatlán: Marca registrada que maneja restaurantes con música en vivo, especializada en música de jazz y tradicional, denominados como -clubs de jazz-. Cuenta con dos sedes: “Jazzatlán Cholula” y “Jazzatlán Capital” así como con festivales activos en la ciudad de Oaxaca, Oaxaca, Guadalajara, Jalisco y Ciudad de México. Tan solo el venue de CDMX cuenta con 21 conciertos a la semana.
Nota importante:
Para la redacción de este artículo se pudo obtener una entrevista con Marco Albert, líder de la banda “Sr. Blues”, la booker del restaurante “Humito”, Malinalli Montes y Gerardo Hernández Páez, Director Financiero de Jazzatlán. Mientras tanto, el productor del FIJO, Rodrigo Rosas negó otorgar una entrevista a Letras en Jazz y Rodrigo Moctezuma no ha generado ningún contacto.
Cabe destacar que agradecemos la confianza, la toma de responsabilidad, transparencia y apertura al diálogo para colaborar en un artículo de esta índole a todas las partes involucradas.
¿Qué sucedió? Orden cronológico
Labanda“Sr.Blues”agendaunafechaparatocarenelrestaurante“Humito”eldía10 de abril del 2025 con un cover de $100 pesos y un pago fijo de $750.00 mxn por músico
Elrestaurante“Humito”recibeunmensajevíaWhatsapp,eldía24demayo,porparte de Rodrigo Moctezuma, productor del FIJO, para invitar al venue a ser parte del FIJO. De acuerdo con Montes, dicho convenio de colaboración implicaba lo siguiente:
1. Difundirconciertos,yaprogramados,delaescenadelacapitaloaxaqueña, incluídos los de “Humito”.
2. Coberturaenmediosdelfestival
3. Difusióncolectivadetodalaescenaoaxaqueña
El restaurante “Humito” acepta dicha invitación con intención de visibilizar el restaurante y los conciertos agendados, en favor de las agrupaciones “Sr. Blues” y “Los Brujos de Huejutla” El día 10 y 11 de abril.
La banda del Sr. Blues se percata de la inclusión de la fecha agendada con “Humito”, en la cartelera del FIJO y en todos sus productos publicitarios
Marco Albert, líder de la banda “Sr. Blues” se comunica, vía Whatsapp, con el productor del FIJO y socio de la empresa Jazzatlán, Rodrigo Moctezuma, para aclarar la situación y exigiendo un pago correspondiente. Ante estos cuestionamientos, así como al exponer su molestia al productor por no cuidar su comunicación con la banda, tanto para incluirlos al festival, como para usar el nombre de la banda en su publicidad, recibió como respuesta de tono indiferente que “el acuerdo fue con el restaurante Humito” y “todo lo hacemos por amor a compartir” proponiendo, también, quitar la participación y aparición de “Sr. Blues” en los productos publicitarios, a lo que Albert aceptó y exigió.
Albert se percata que el FIJO cuenta con patrocinadores y un boleto “Full access” a $888.00 con acceso a todos los conciertos, incluyendo los del restaurante “Humito”, y una playera de la marca Jazzatlán.
Albert acude a INDAUTOR para recibir asesoría de lo acontecido, recibiendo como respuesta que no puede tomar ninguna acción legal ya que no cuenta con registro del nombre “Sr. Blues”.
Albert se comunica con Montes para aclarar la situación con “Humito” y el FIJO, a lo que Montes acepta el error de falta de comunicación con los músicos al no preguntar si querían, o no, formar parte de la cartelera de FIJO, asumiendo que aceptarían y que se verían beneficiados por la publicidad masiva que ofrece FIJO. De inmediato, el día 1ro de abril, Montes le pide a Moctezuma quitar a “Sr. blues” de la cartelera. La respuesta obtenida por Moctezuma fue que para ese momento ya era imposible hacer algo ya que todo estaba pautado en redes sociales, así como aclarar que el boleto no incluye los eventos de Humit”. Lo que coincidía con la boletera oficial del FIJO pero no de toda la publicidad “Yo tomo toda la responsabilidad sobre esa falta de comunicación de mi parte con los músicos, sin embargo, para ese momento, yo no tenía conocimiento del boleto “All access” comenta Montes a Letras en Jazz, agregando que tenía la responsabilidad de preguntar todos los detalles a los organizadores.
Al pasar los días, Albert notó que el nombre de su banda, “Sr. Blues”, seguía apareciendo en la publicidad del festival, a lo que acudió a la cuenta oficial de Jazzatlán Capital para exponer la situación, así como para quejarse de la falta de ética, educación y profesionalismo de todo lo sucedido, además de no darle honorarios a los músicos de los eventos ofrecidos en el circuito de restaurantes de la ciudad de Oaxaca, aún habiendo un boleto “All access”, recibiendo como respuesta por parte de la cuenta oficial de Jazzatlán Capital que: “No hay un solo patrocinador que esté dando un patrocinio económico y que todos los artistas están sujetos a la taquilla correspondiente de su evento. Nuestra única apuesta como festival es promover a la mayor cantidad de músicos posibles. Somos 3 personas detrás de todo el esfuerzo y sí es correcto, lo hacemos por el gusto y amor de compartir” Aclarando, además, que el nombre de “Sr. Blues” se quitó en la última cartelera y video publicados y que intentarán quitar el nombre de la agenda.
Albert emite una queja en sus redes sociales sobre lo sucedido, el día 18 de abril, habiendo ya concluido el Festival, a lo que Moctezuma reaccionó con un emoji de “risa”, para después bloquear a Marco Albert de dicha red social, para después realizar publicacione con tono de burla y sarcasmo de la situación.
El día 24 de abril se publica el artículo “Una de descuidos y jazz en Oaxaca” en el medio local de Oaxaca El garage istmeño.
El 25 de abril, la cuenta de Jazzatlán Cholula, tanto de Instagram como de Facebook, emite un comunicado, a través de historias (duran 24 hrs) no publicaciones en donde solamente se disculpan por los “Inconvenientes causados” por el FIJO, sin embargo, en ningún momento hacen referencia directa a Marco Albert o la banda “Sr. Blues”.
Jazzatlán Capital le niega el acceso a Letras en Jazz por compartir el artículo “Una de descuidos y Jazz en Oaxaca”. Unos minutos después, le avisan que “todo fue un mal entendido, no estás vetada”. Esa misma noche, Pamela Vazquez, quien dirige el blog de Letras en Jazz y escribe este artículo, le pidió una entrevista a Rodrigo Rosas, gerente de Jazzatlán Capital y productor del FIJO “por esparcir chisme aún después de que te damos de comer. Obviamente a ti se te cierra la carta (menú de alimentos y bebidas)”.
El lunes 28, la cuenta de IG de Letras en Jazz fue bloqueada por Jazzatlán Capital.
El día 29 de abril, Gerardo Hernández Páez, Director Financiero de Jazzatlán, se disculpa en llamada con Pamela Vazquez y Letras en Jazz por el trato recibido el sábado en las instalaciones de Jazzatlán Capital, la negativa a la entrevista y lo dicho por Rodrigo Rosas. Asimismo, se comunicó por llamada con Marco Albert, líder de la banda “Sr. Blues” para disculparse de “todo lo sucedido” en el marco del FIJO.
Hasta el día miércoles, 30 de abril, “Sr. Blues” seguía apareciendo en un video promocional del FIJO en la cuenta oficial de Jazzatlán Capital. Letras en Jazz sigue bloqueado por la cuenta oficial de Jazzatlán Capital y Moctezuma y Rosas siguen sin emitir postura sobre todo lo acontecido.
Lectura adyacente:
La situación laboral de las y los músicos, tanto de jazz, blues o cualquier otro género, es evidente y preocupante al ser la informalidad una práctica común y aceptada, generando un contexto vulnerable a la precarización, abuso de poder y dificultad de acceso a la justicia al quedar en el limbo de lo permitido y no, de lo ético y no, de lo legal y no.
Como consecuencia, dicha informalidad y falta de regularización de este tipo de eventos, las personas profesionistas y oficios de base, como lo son las y los artistas, técnicos de sonido, personal de limpieza, seguridad, catering o atención al cliente, etc., quedan expuestas ante la explotación laboral, abuso de poder, malos tratos, riesgos de salud y seguridad en su persona y equipo de trabajo, como se ha visto en eventos recientes como Axe Capital y que ya es inevitable notarlo, evidenciarlo y cuestionarlo, sin importar el tamaño del evento.
De acuerdo con la información proporcionada por Gerardo Hernández Páez, Director Financiero de Jazzatlán, el FIJO fue un esfuerzo independiente y autogestivo por parte de sus productores, Rodrigo Rosas y Rodrigo Moctezuma, con permiso del uso de la marca de “Jazzatlán”, sin embargo, “no son responsables los club de jazz “Jazzatlán Cholula” o “Jazzatlán Capital” de la gestión del FIJO. Es decir, si bien Moctezuma es socio de la empresa “Jazzatlán”, y Rodrigo Rosas gerente de Jazzatlán Capital, la gestión del FIJO son ajenos a su contrato laboral con Jazzatlán y sus clubes.
Dicho esto, al momento de redactar este texto y al no recibir respuesta o contacto con Rodrigo Rosas o Rodrigo Moctezuma, no sabremos quién es el director del festival que asuma la responsabilidad de los “inconvenientes” causados a Marco Albert, la banda “Sr. Blues” e incluso el restaurante “Humito” por la falta de comunicación, claridad y transparencia y los descuidos durante la gestión y ejecución del festival, así como conocer, realmente, el modelo de gestión y de negocio del mismo, dejando muchas dudas al air, ya que, de acuerdo con Páez, Tercera Raíz tampoco es responsable de la producción del FIJO.
Por otro lado, dejan en evidencia que existe una necesidad de la profesionalización de la gestión y producción de festivales, así como la creación de políticas y leyes que protejan a los músicos independientes de malas prácticas por parte de productores de festivales, restaurantes o cualquier espacio que ofrezca música en vivo.
Ante esta situación, Páez menciona que a partir de ahora tomarán nota de las quejas recibidas y realizarán los cambios pertinentes para garantizar la seguridad y bienestar de las personas que estén involucradas en cualquier festival que use la marca de “Jazzatlán”, exigir la regularización de empresas y tener en regla todos los permisos ante gobierno necesarios, así como generar lineamientos que garanticen el buen trato al talento.
Aunque aplaudimos esta toma de responsabilidad de la marca “Jazzatlán”, es importante resaltar que es una responsabilidad compartida entre socio, productores y patrocinadores todo lo sucedido con los músicos y clientes. En este contexto de gestión de proyectos, la toma de responsabilidad de Montes es igualmente una muestra de proactividad y transparencia, necesario en cualquier situación como estas.
Esto es un contexto generalizado, es decir, no solo es la banda de “Sr. Blues” quienes pasaron por esta situación, sino miles de músicos alrededor de México. Acciones que solo se pueden evidenciar en quejas en redes sociales, ya que no es común la queja pública, el uso de las instituciones jurisdiccionales para el acceso a la justicia, ya sea por debilidad y desconfianza institucional o falta de recursos económicos para emprender una medida legal.
Por otro lado, los festivales han sido un fenómeno creciente en México, una situación que muestra una vida de esparcimiento activa y robusta por la demanda de los mismos, sin embargo, son espacios que tienen un costo de entrada y consumo que excluye a una parte de la sociedad. Ahora bien, el mercado de eventos masivos, o no, de música, en definitiva no son malos, generan un derroche de dinero a nivel local, empleos, entre otras consecuencias positivas, pero muchas veces, como menciona Albert, para lograrlo, el “cómo”, muestran malas prácticas y poca ética profesional, entre ello, no incluir a más talento local de una comunidad, ya precarizada, como lo es escena musical de la ciudad de Oaxaca.
En este sentido, es primordial poner sobre la mesa el enfoque propositivo que tiene Letras en Jazz, es decir, además de la queja que expondremos por parte de Marco Albert, líder de la banda de blues “Sr. Blues”, exponer rutas de acción que mejoren procesos para que todos los actores involucrados y nuestras lectoras y lectores, puedan tomar nota para futuros proyectos de la misma índole y mejorar sus prácticas para garantizar un trato y condiciones dignas y transparentes, tanto para el talento, como para el consumidor.
Notas para el futuro
Talento:
Denunciar y hacer pública su queja ante situaciones que le parecen injustas.
Es conveniente proteger los nombres de las agrupaciones ante INDAUTOR para poder
proceder ante una demanda. Legar por uso indebido de su nombre.
Exigir un trato y retribución digna a festivales de empresas privadas.
Contar con un contrato de prestación de servicios para su labor.
Venues:
Tener una comunicación clara, oportuna y transparente en todo momento con el talento local.
Contar con un contrato de colaboración en donde estipule las condiciones entre la empresa productora de festivales, con el venue y el talento involucrado.
Productores Festivales:
Tener lineamientos, permisos de gobierno, estándares de calidad y procesos en caso de emergencia para garantizar el bienestar físico de todas las personas que estarán presentes en dicho festival.
Contar con lineamientos que garanticen el trato digno al talento local.
Acercarse, directamente, a las y los músicos involucrados en las agendas de los venues invitados a ser patrocinadores oficiales del evento, con una invitación formal en donde
exponga las condiciones de colaboración de forma clara.
Incluir a músicos y músicas que “han picado piedra por años” por empresas ajenas a la
comunidades locales a donde buscan posicionamiento de marca.
Ofrecer un honorario, fee o pago a los músicos locales, aún con mayor razón si habrá un
boleto de por medio.
Transparentar modelos de negocio, permisos ante gobierno, protocolos de seguridad y
lineamiento de ética profesional.



